divendres, 11 de març del 2016
divendres, 4 de març del 2016
Sábado 27 de febrero 2016
PRIMER CAPÍTULO
... Llevé a Victor a Corbera, jugaban los niños que él entrena. Lo dejé en la puerta del campo, y sin perder tiempo me dirigí hacia Sant Feliu de Llobregat, allí vivo yo.
Busqué aparcamiento cerca de casa pero imposible, ni aún siendo sábado por la mañana... en fin... aparqué al lado de la estación. Cogí el tren siguiente dirección Barcelona hasta la estación de Sants, allí me esperaba Marina con su padre para hacerle el relevo de esperar a Jesús y Daniel. No sabíamos en que AVE vendrían de Madrid, solo sabíamos que el concierto era a las 20h en Granollers, una población a 40km del centro.
No había mucha gente, y como no estaba muy claro por donde saldrían, ni en que tren vendrían, las chicas estaban muy repartidas, en el vestíbulo de la estación, en una puerta de entrada a trenes rápidos, en la puerta ... Subimos al parking que hay encima de la estación donde está la entrada del Hotel Barceló donde se han alojado en varias ocasiones en sus conciertos en Barcelona, decían que había un ascensor directo al hotel y que posiblemente saldrían por allí a la espera de un vehículo que los recogiera en el mismo parking del hotel, pero el seguridad, un señor bastante áspero y sin muchos modales, nos echó de allí a mi, a Marina y a un grupo de niñas con un par de padres.
Volvimos a bajar al vestíbulo de Renfe mientras oíamos que Jesús había colgado un Snapchat. ¡¡¡oh¡¡¡ lo miramos e hicimos un par de capturas para ver detalles, era un pequeño vídeo de una carretera nevada grabada dentro de un coche desde el asiento de atrás y pasando al cristal delantero, dejando ver el ticket de una autopista de pago, una radio en el salpicadero con detalles plateados y un GPS en el cristal, donde afinando la vista se apreciaban 3 dígitos, un uno y los dos siguientes dudosos, yo diria que ponía 185km eso eran los km hasta su destino.
Todo aquello nos daba la pista de que no venían en AVE, Jesús y Daniel venían en vehículo privado sentados en los asientos traseros. Así que ya no hacíamos nada en Sants. Eran las 12h40'
Aún sentadas en la puerta de salida de los trenes de largo recorrido, nos quedamos mirándonos con desilusión. Hacía dos semanas que los fuimos a recibir al aeropuerto, el día que fuimos a su concierto de Viladecans. y logramos verlos pero de lejos, sin poder ni acercarnos. La seguridad, los mossos de escuadra y Guardia Civil, los protegían con miedo de todas nosotras.
Entre miradas le dije:
-Marina voy a llamar a los hoteles cercanos de Granollers, Yo intuía que irían cerca del lugar de la actuación.
Llamé al más conocido de 4 estrellas de Granollers. Me constestó un chico el cual no sabía ni quien eran Gemeliers. Yo pensé que lo estaba haciendo muy bien el disimulo o realmente no sabía quien eran. Mi segunda llamada fué (sin esperanzas) a un segundo hotel a 4,8 km de Granollers,
Me contestó una chica muy amable. Le hice una exposición antes de preguntar nada de quien era y de la actuación que tenían. Me preguntó de donde la llamaba y después me dijo que no podía darme esa información pero que los cámaras y músicos si estaban allí alojados, diciendome que los chicos no creia pues estaban alejados del centro.
Con aquello tenía suficiente y de sobra para acercarnos al lugar.
La frase fue: Marina... el NO ya lo tenemos. (esta frase será recordada :))
Ahora con esperanza, volvimos a coger el tren hasta Sant Feliu. Marina impaciente quería hacer los 40 km sin espera. Pero era pasadas la una del mediodía, y nos dirigimos primero a casa. Hice la comida, para dejarla, Marina había comido en Sants y "tentempié" y ya no tenia hambre. Yo me hice una ensalada mientras la paella estaba en el fuego para dejarla hecha. Se nos hicieron las 14h30. Y nos dirigimos en coche hasta granollers. Marina puso su último CD diciendo que teníamos que ir ambientándonos. Cantando y muy animadas, Waze nos llevó sin equivocaciones hasta la carretera que subía a un hotel, elegante solitario a las afueras del centro de Granollers. La carretera acababa en una puerta abierta a un parking privado donde habían varios coches y dos furgonetas blancas con cristales tintados. Había llovido, el suelo estaba mojado, aparcamos a la entrada y fuimos mirando la foto que habíamos capturado comparando todos los salpicaderos posibles.
Solo nos quedaba la ultima furgoneta. donde además tenía una lata de RedBull abierta. No había duda, este era el vehículo de la foto.
Nerviosas, propuse de ir primero por los jardines mirando hacia dentro del hotel, no se veía a nadie. Había una piscina exterior, con unas hamacas de mimbre muy bonitas, aunque todo muy mojado por la lluvia caida. decidimos de entrar. Había dos puertas de cristal, solo al abrir la primera vimos a tres personas esperando en un pequeño mostrador. Una era un cliente hablando en inglés con la recepcionista. Y las otras dos estaban a la derecha del mostrador de espaldas a la puerta. Pero no había ninguna duda para Marina. "Mama es Dani....", el cuerpo nos empezó a temblar. No sabía que hacer, ni que decir, no tenía previsto este encuentro. Dani estaba acompañado de Alberto (su manager), lo primero que pensé fue, les preguntaré si tienen entradas para esta tarde. Lógicamente yo ya sabía que estaban agotadas, pero necesitaba un hilo para empezar una conversación. Se giraron, hablé con Alberto y después de ésto le dije: Dani, te importa saludarnos, le dió un fuerte abrazo a Marina y un beso cogiéndola con las dos manos, y con un cariño increible. Le pregunto algo, ella dijo que si. Fue un momento corto pero muy bonito. Nos dijo que no podía hacerse fotos en el hotel, porque lo tenían prohibido pero que volviéramos a la noche despues del concierto que entonces podrían fotografiarse. Y que por favor no dijéramos nada de donde estaban para poder estar tranquilos. Y Alberto dijo a Daní, vamos a comer ya...
Se dirigieron a la sala de al lado, entonces vimos a Jesús con sus padres y a Toño, de la organización, siempre los acompaña también.
La sala de espera del hotel era cómoda, nos quedamos en el primer sofá al lado de la puerta, a la espera que comieran tranquilos y poder hablar con Jesús.
Así que nos acomodamos ya sin chaquetas a la espera de un beso de Jesús.
Estábamos desconcertadas, muy contentas, muy nerviosas, en una nube, en un sueño increible y jamás predecible en nuestros pensamientos.
...
Sábado 27 Febrero 2016
SEGUNDO CAPITULO
Estuvimos sentadas una media hora o cuarenta minutos, nos fué bien, pues los nervios se calmaron mientras observábamos a unos 50 metros a la familia Oviedo Morilla y sus dos managers disfrutar de una comida un poco informal, no por el restaurante, que era impresionante, elegante y sin duda con una cocina excepcional. Sino por las veces que se levantaban de la mesa unos y otros, enseñando sus mòviles y las conversaciones en grupos que se diferenciaban. Eva estaba sentada al lado de Juan Carlos, de cara a nosotras, igual que Jesús, con sus gafas de pasta oscura, mientras ojeaba el mòvil con Toño, a su lado. Enfrente y de espaldas a nosotras, sentados Dani y Alberto, con mucha complicidad entre ellos.
Eva se levantó entre el primer y segundo plato. Vi que venía hacia nosotras para ir a la puerta del hotel a fumar, paso por nuestro lado regalándonos una sonrisa.
No la molestamos, aunque mientras se fumaba el cigarro pensaba en que podíamos decirle, cuando volvió a entrar para volver a la mesa, me levanté y le dije:
- Eva, perdona, hemos intentado comprar entradas para el concierto de esta tarde pero están agotadas, tu no podrías conseguirnos unas para comprar?. Nos dijo muy amablemente que ese tema lo llevaba una empresa externa, que ellos vienen cantan y saben poco más, pero que hablara después con Toño, que quizás el sabría como conseguir. Me pareció encantadora, y ese acento andaluz que les hace diferentes, le hacia un tono gracioso.
Seguimos esperando... vimos que se iban levantando.
Los primeros fueron Dani y Alberto que fueron hacia la furgoneta de fuera pasando por nuestro lado y Dani nos sonrió. Ya habíamos estado con él, no quisimos volver a abordarlo.
Cuando llegaron a la furgoneta no tenían las llaves y subieron a su habitación en la tercera planta. Volvieron a bajar y cogieron un neceser negro con sus cosas personales. (solo con observarles teníamos más que suficiente) Nos hubiéramos pasado allí semanas, si ellos corretearan de esa manera a nuestro alrededor, lo se.
El tercero en levantarse fué Jesús. Fué en busca de su hermano. Vino solo, yo creo que sabía que le ibamos a decir algo, y con carácter tímido paso por nuestro lado mirándonos,
Decididamente nos levantamos las dos con el corazón acelerado.
-Hola Jesús, como estás? ...
Nos saludó, le dió dos besos a Marina y hablamos un poco con él. Nos dijo que por favor no grabásemos ni hiciéramos fotos. que no se lo permitían en el hotel.
Le preguntamos por el concierto y al final le dije que si le podía dar "algo" suyo a Marina de recuerdo. Dijo que no tenía nada encima, pasando sus manos por los bolsillos de la chaqueta y mirando sus muñecas, enseñando una sola pulsera negra con detalles rojos, en su muñeca izquierda, Pero no desistió, "es un encanto". Dijo que ahora cuando bajara Dani y Alberto le pediría algo, aunque fuese una foto para firmarla.
Nosotros pensábamos en algo más personal, pero de todos modos le dimos las gracias.
Y salimos fuera, se acercaba la hora de irse ellos.
Estando fuera salió Jesús, le pedimos de hacernos allí foto con él. Les tuve que pedir que cambiaran de lugar pues el sol me daba en la cámara y era imposible enfocar, El miró el rótulo del Hotel y me dijo, sobre todo que no se vea el nombre del hotel.
Yo iba grabando, en vez de hacer fotos, pensé que los fotogramas serían más.... y más para escoger.
Nos preguntó que como habíamos sabido el hotel en el que estaban, le expliqué que habíamos observado sus snaps y así sabiendo que venían en coche particular podían escoger hotel en la afueras y a base de llamar a hoteles "caros", esa fue mi palabra, y el sonrió.
Me pareció un chico tímido, sensible, simpático y con un gran corazón.
Cuando ya se dirigía hacia la furgoneta le dijimos:
-Jesús... acuérdate de darnos algo... Y dijo si si.. no os vayáis que ahora baja Dani.
Entro a la furgoneta y le dijo a Toño: Toma dale esto a Marina y dile que es uno de mis primeros "foulares" que he tenido. Le dió un PAÑUELO PARA EL CUELLO de color azul cielo y blanco..
DIOS... Marina estaba con lágrimas en los ojos, Jesús no se daba cuenta que era el MEJOR regalo de su vida.
Desde el 27 de febrero no se separa de él.
Salió Dani y le dije :
-Dani, nos vamos. Te puedes hacer una foto con Marina?
-Por supuesto - dijo-. Y cogiéndola por los hombros y sin dejar de sonreir posó para nosotras, Marina sin soltar el pañuelo de sus manos...
Allí tambien estaba Toño, del que tuvimos una amigable conversación mientras bajaba Dani, nos explicó que tienen que coger Hoteles a las afueras para poder estar tranquilos, y que querían hacer dos actuaciones pero que tenían que marchar al dia siguiente a Italia, y que solo habían podido un solo día. Hablamos un rato sobre las fans hasta que ya bajo Dani.
Nos despedimos de todos, deseándoles les fuese genial el concierto. Muchas gracias nos dijeron... Cerraron ya la puerta trasera de la furgoneta y nos dirigimos al coche entre nubes...
Salimos primero y ellos detrás nuestro por el camino que nos devolvía a la vida real. Hasta una rotonda de la que nos separó los caminos.
No podíamos dejar de pensar en lo felices que nos habían hecho, en esa hora y media que habíamos estado allí. Volvíamos a nuestra vida, con un pañuelo que será el mejor recuerdo que tengamos.
Un día que nos marcó para siempre y que se, que aunque busquemos y busquemos otro momento así, nunca será lo mismo.
Ha sido uno de los mejores momentos vividos con Marina. Porque su felicidad es la mía.
Dos Gemeliers.
dijous, 3 de març del 2016
dimecres, 2 de març del 2016
EL DIARIO VASCO 2 DE MARZO DE 2016
En la discográfica comparan el fenómeno de los gemelos sevillanos con Los Pecos
«El miedo con los adolescentes es siempre que acaben como juguetes rotos», advierte un sociólogo. Pero Dani y Jesús «van a un colegio público y hacen una vida lo más normal posible»
- 'Chicas chicas / que quieren tocarme / chicas chicas / yo no sé qué haría / si faltasen oh oh...’. A esas chicas los Gemeliers les dicen «princesas». Dani y Jesús Oviedo son la versión adolescente y 2.0 del «galán» que antes representaba un señor con traje y ahora personifican estos gemelos sevillanos con tupé que hace dos domingos cumplieron 17 años. Los 'celebraron' en Bilbao, con una firma de autógrafos y reparto de besos masivo que hizo necesaria la presencia de la Ertzaintza y la Policía Municipal a las puertas de El Corte Inglés: se juntaron más de 600 fans, mayoritariamente chicas, y algunas habían hecho guardia desde las dos de la madrugada en la calle.
En la discográfica, Pep's Music Group, dicen que no recuerdan un fenómeno así «desde Los Pecos», que también eran dos hermanos (Francisco, el rubio, y Pedro, el moreno). A Gemeliers les ficharon cuando salieron de 'La Voz Kids', el programa de jóvenes talentos de Telecinco. Fueron la sensación, pero venían entrenados, que con 4 años ya cantaban en el programa de Juan y Medio en Canal Sur ('Menuda Noche') y tenían un disco con diez canciones infantiles. «Nunca se sabe, pero nos pareció que tenían potencial, que transmitían... Y además gozaban de un apoyo enorme en las redes sociales», justifica el fichaje uno de los directivos de la discográfica de Pepe Barroso, descubridor también de Malú, Melocos, Los Caños y Manu Tenorio ('Operación Triunfo').
El apoyo online de estos gemelos de Mairena del Aljarafe (Sevilla, 1999) no es solo enorme (más de 215.000 seguidores), es que crece al mismo ritmo (casi treinta fans cada hora) que la venta de sus discos. 'Lo mejor está por venir', publicado en 2014, vendió más de 100.000 unidades y el segundo, 'Mil y una noches', lleva más de 70.000.
¿Por qué gustan tanto?
One Direction y Auryn abrieron una senda que antes transitaron grupos como Backstreet Boys y ahora Gemeliers en España. Aunque también se están abriendo hueco en Italia, México, Ecuador y Colombia. Tienen un buen repertorio y llegan a las niñas. Son dos galanes que dicen piropos, suben a las chicas del público al escenario en sus conciertos y les llaman 'princesas'. Son dos chavales super accesibles, cariñosos y con mucho arte. Y el hecho de que sean dos visualmente impacta -argumentan desde la discográfica-.
¿Se les ha subido a la cabeza?
No, no, para nada, son muy humildes y su día a día es normal. Van a un colegio público y estudian primero de Bachillerato. A Dani le gustan las cuestiones relacionadas con la naturaleza y el medio ambiente y Jesús tiene una vena más empresarial. Intentamos que pierdan las mínimas horas de clase, y si tienen que faltar hacen tutorías online con los profesores.
¿Y qué tal llevan los estudios? Porque en 'Pasapalabra' quedaron en evidencia al decir que el séptimo mes del año era 'jueves', confundieron olla con 'holla' y dijeron que el 'sitio con vegetación y con agua aislado en medio de un desierto' es una isla.
Llevan los estudios bastante bien.
En Pep's Music Group no quieren ahondar en una polémica que les colocó en los titulares de todos los diarios y en el objeto del pim pam pum, pero recuerdan que Gemeliers fueron al programa de Telecinco por una causa benéfica y que evidentemente saben que el séptimo mes del año es julio y no jueves. La última vez que han salido en los medios por cuestiones ajenas a la música fue hace unos días, cuando abandonaron un plató de la televisión gallega ofendidos por los comentarios del presentador que dijo que nunca compraría su disco. «Debería daros vergüenza conseguir audiencia a base de confundir el humor con el mal gusto», se tomaron luego ellos la revancha en Twitter.
Allí (en la red del pajarito) no hay críticas, ni mofas a su costa, sólo miles de fans al quite. Esos (sobre todo, esas) que hacen cola a la puerta de los hoteles y lloran en sus conciertos. «El riesgo de los artistas adolescentes es que acaben como juguetes rotos. Ese era el eterno debate con Joselito y Marisol. Ahora Gemeliers son dos adolescentes guapos que gustan a todos. La cuestión es que sean capaces de adaptarse cuando eso pase, cuando tengan que competir con artistas como Pablo Alborán, por ejemplo, dirigirse a un público adulto», advierte Luis Manuel Ayuso, profesor de Sociología en la Universidad de Málaga.
Escuchando la letra de algunas canciones cualquiera pensaría que ya se dirigen a un público adulto: 'Cuántas lunas he llorado / por tu amor arrebatado / desgarrada tengo el alma de dolor...', 'Quiero sentir la pasión / que me das cuando rozas / tu cuerpo con mi cuerpo (...) Sin ropa / nena ven conmigo ya / no te dejaré escapar / tan solo tú y yo / disfrutándonos con la piel en la arena...'.
Esas letras las cantan niñas de 10 años.
Los chavales cada vez entran antes a la vida erótica. Curiosamente se ha producido un retraso en el acceso al mercado laboral pero una precocidad en el acceso a las conductas sexuales. Las películas de Disney hablan de príncipes y princesas y acaban en beso, los anuncios de las marquesinas muestran a mujeres en bragas y a hombres en calzoncillos. ¿Te acuerdas de cuando a Sabrina se le salió una teta en un programa de Nochevieja? Era 1989 y el Telediario dio las imágenes al día siguiente a cámara lenta. Fue un gran acontecimiento y estuvimos un año hablando del tema. Pero eso hoy no impactaría. Lo mismo ocurre con las letras de las canciones. Hoy los adolescentes escuchan eso de 'Marta tiene un marcapasos', que cantaban Hombres G en los años 80, y se echan a reír. ¡Pero si hoy los niños hacen sexting y se envían fotos desnudos a través del móvil! Por eso Gemeliers no canta copla y cantan esas canciones. Porque vende lo erótico, el amor, el desamor... -explica gráficamente Ayuso-.
En la discográfica reconocen que algunas letras «no las pueden entender niñas de 9 años», pero insisten en que tampoco cantan solo para ellas. «Buscamos un público más mayor, no solo infantil».
Y lo hay, porque las mamás (también algún papá, pero pocos) acompañan a sus hijos a los conciertos, «incluso las yayas». Pero las auténticas fans son las preadolescentes, un colectivo numeroso que no ha cumplido ni los 14 años. «El fenómeno fan ha existido siempre y se hace más evidente en la adolescencia, que es cuando el chaval empieza a formar su personalidad. Se separa del grupo de origen, de su familia, y busca nuevos modelos con los que identificarse. El principal modelo es el grupo de amigos, pero también los artistas que ven por la televisión o en las redes sociales. Por eso los adolescentes escuchan tanta música. Pero no la música que ecuchan sus padres. Un chico no quiere ser la extensión de su padre, quiere diferenciarse de él. Y eso es algo que ha sucedido siempre, y de la misma manera. La diferencia es que antes ocurría a los 14, que era cuando ibas al instituto y le pedías por primera vez a tus padres que te compraran unas zapatillas de marca. Y ahora se lo piden a los 10 ó 12 años». No solo las zapatillas, también el móvil, abrir una cuenta en las redes sociales... «Hay una precocidad en los procesos de maduración de los adolescentes y eso implica que entran antes a la vida erótica de la que hablan esas canciones», advierte Ayuso.
No parece muy adecuado que una niña de 10 años cante canciones de amor.
Eso no se puede parar. El reto ahora es de los padres. Tienen que hacer un esfuerzo y educarles en los valores, enseñarles a distinguir lo que es la realidad y lo que no. El otro día escuchaba a un padre muy preocupado porque su hijo se había obsesionado con 'Star Wars'. Antes tu padre vigilaba con quién salías, quiénes eran tus amigos. Ahora no puede porque tus amigos están en Internet y en Internet también hay un montón de contenidos que chavales cada vez más jóvenes ven sin entender. El problema es que como son más niños que antes les cuesta más diferenciar lo que es una película como 'Star Wars' de lo que es la realidad.
En todo caso, lejos de presentar a los artistas como el coco, Luis Manuel Ayuso advierte que los ídolos juveniles «ayudan a construir la personalidad» de los adolescentes en una etapa crucial que determinará cómo serán de adultos. «En ese momento es, como se decía antiguamente, cuando se ve si alguien va a ser un hombre de provecho o no».
Y hoy millones de adolescentes en España han encontrado en Gemeliers un espejo en el que reflejarse. Igual que en los 70 hicieron con los Pecos. Claro que aquellos cantaban otras cosas: 'Si comprendes que el amor es todo / Si me acompañas cuando yo estoy solo / Si me sonríes cuando vengo a verte / Si comprendes que eres tu mi gente...'
dimarts, 1 de març del 2016
Jesús y Daniel Oviedo Morilla
Gracias por visitar mi página web, aquí intentaremos colgar nuestras experiencias y entre tod@s hacer de ser Gemelier, una forma de vida.
Jesús y Daniel Oviedo Morilla, gemelos de Mairena de Aljarafe, Sevilla. Nacieron el 21 de febrero de 1999, desde los 4 años se dedican al mundo de la música. Alcanzaron la popularidad en el año 2014 tras su participación en la primera edición de La Voz Kids. No ganaron la batalla, pero si la guerra.
Tienen todo lo que hay que tener para el éxito. Dos voces que se compenetran perfectamente, estilo, juventud, simpatía, dulzura, sensualidad, frescura, y un equipo con ellos que les saca lo mejor de ellos.
La gente habla,
**** los que hablan bien, morirían por ellos
**** los que hablan mal..... envidia o ignorancia?
pero os aseguro que no dejan indiferente a nadie.
Hacer la prueba. Preguntar: Gemeliers??
Esa soy yo. Una de ellas....
Subscriure's a:
Missatges (Atom)